EL cuerpo es un conjunto de zonas erógenas. Cada zona remite:
- a una falta fundamental
- a una ausencia de zonas erógenas del otro cuerpo
- a las zonas erógenas del mismo cuerpo (dimensión de la represión)
- a las zonas no-erógenas.
Parecería haber una insatisfacción esencial.
El privilegio del cuerpo reside en el hecho de que subraya la articulación
del objeto con el significante.
la experiencia afirma que el cuerpo es superficie, límite para la histérica,
resistencia para el obsesivo.
La relación simétrica entre el exterior y el interior, es una engañosa apariencia
que el cuerpo mantiene, pero que la experiencia analítica invalida.
En general el cuerpo está ausente del discurso, como si por esencia, uno fuese
antinómico del otro.
No obstante será necesario y éste es el comienzo del análisis hacer aparecer
el cuerpo en el discurso.
Lucía Serrano
Lucía:
ResponderEliminarPase a visitarte.Me gusta mucho la sicología y la siquiatria.
Te seguiré para leer tus interesantes artículos.
Cariñosos saludos.Rayén